#1 por nathanKPOP
31 dic 2015, 14:04

Qué vergüenza. Odiar es como la vitamina C diaria.

#2 por toaster
31 dic 2015, 14:07

Me @legrx, chic@. Ahxrx serés much@ mes feliz.

#3 por lechosito
31 dic 2015, 14:11

Odiar es la sal de la vida.

#4 por nefele
31 dic 2015, 14:12

Una muy buena reflexión, a favoritos.

#5 por tutus
31 dic 2015, 14:16

Si.. muy buena..es como la frase aquella " se tu intenta ser feliz, pero ante todo se tú"

#6 por franco5698
31 dic 2015, 14:19

Yo dejaré de odiar cuando la gente deje de poner: tod@s, chic@s, un@, mism@...

#7 por imaginatequetengounbuennombre
31 dic 2015, 14:26

Con "un@ mism@" has cobrado una gran importancia para mí, pero no positivamente. Quiero encontrarte, abrazarte, decir "te quiero" y ,cuando menos te lo esperes, agarrar tu cuello con fuerza y no dejarlo hasta que vea desaparecer el último vestigio de vida en tus ojos. Así de importante eres para mí.

#8 por paquilo
31 dic 2015, 14:41

Curiosamente, cuanto más pequeño es un corazón, más odio cabe.

Demuestras inteligencia y haber madurado.

#9 por aldebaran25
31 dic 2015, 14:59

#1 #1 nathanKPOP dijo: Qué vergüenza. Odiar es como la vitamina C diaria.Y si sabes que el exceso de vitamina C puede causar molestias a la salud. Igualmente odiar no siempre es tan bueno!!

#10 por nathanKPOP
31 dic 2015, 15:00

#9 #9 aldebaran25 dijo: #1 Y si sabes que el exceso de vitamina C puede causar molestias a la salud. Igualmente odiar no siempre es tan bueno!!Aguafiestas -.-'

#12 por lorilemaris
31 dic 2015, 16:38

Cuanta razon si pudiera te daba 1000 votos positivos. Yo hace poco conseguí llevarlo a cabo y es lo mejor que se puede hacer. La indiferencia hacia los que te defraudan es la mejor solución, no hace falta ni odiar ni vengarse ni evitar a nadie.

#13 por expo7
31 dic 2015, 18:43

Secundo totalmente todo lo que has dicho. Yo mismo llevo ya bastantes años siguiendo esa filosofía, y ahora mismo prácticamente no conozco el sentimiento del odio.

#14 por 1nim
1 ene 2016, 22:48

Llevas razón, en serio. Supongo que...en lugar de pensar "me han hecho esto", deberíamos pensar "ha hecho esto, ergo es imbécil, por tanto no me interesa una persona imbécil", racionalizar y no dejar que nos controlen las emociones.